Acerca de
Sandy & Ventanas

Todo comienza, desde muy temprano, allí sentada en la butaca cubierta de un vibrante terciopelo rojo, con mis piernitas flotando y mis pies, que no llegan a tocar el piso, danzando al péndulo del misterio. Expectante, al interior de una caja negra se abre el telón y comienza la magia. Desde ese momento teatral de la infancia intento buscar mi lugar de observadora, a través de sensaciones perceptivas, un agradable esfuerzo que va desde abrir mis pupilas al extremo de lo posible, gigantes, desafiantes, hasta abrir todas mis ventanas creativas.

Activando la retina

Así abracé en mi camino diversas disciplinas, entre ellas la pedagogía, la cual me permitió entrar al escenario del aula para captar nuevas miradas inquietas y deseosas de abrir su campo formativo.

Algunos años después, mi deseo por descubrir el atrapante mundo del arte me llevó a unir mundos: el teatro, la danza, la improvisación, la música, el cine, los viajes, la fotografía.

Incansables escenarios me hacen observar un mundo más allá de mi propia retina, intento captarlos y revivirlos por un momento dentro de una fotografía viva, dentro de un retrato efímero.

Hoy me resulta urgente indagar en una retina social, colectiva y amplia, habitando mi cuerpo emocionado.

Activando la retina

Todo comienza, desde muy temprano, allí sentada en la butaca cubierta de un vibrante terciopelo rojo, con mis piernitas flotando y mis pies, que no llegan a tocar el piso, danzando al péndulo del misterio. Expectante, al interior de una caja negra se abre el
telón y comienza la magia. Desde ese momento teatral de la infancia intento buscar mi lugar de observadora, a través de sensaciones perceptivas, un agradable esfuerzo que va desde abrir mis pupilas al extremo de lo posible, gigantes, desafiantes, hasta abrir todas mis ventanas creativas.

Mi propio andar

Así abracé en mi camino diversas disciplinas, entre ellas la pedagogía, la cual me permitió entrar al escenario del aula para captar nuevas miradas inquietas y deseosas de abrir su campo formativo.

Algunos años después, mi deseo por descubrir el atrapante mundo del arte me llevó a unir mundos: el teatro, la danza, la improvisación, la música, el cine, los viajes, la fotografía.

Incansables escenarios me hacen observar un mundo más allá de mi propia retina, intento captarlos y revivirlos por un momento dentro de una fotografía viva, dentro de un retrato efímero.

Hoy me resulta urgente indagar en una retina social, colectiva y amplia, habitando mi cuerpo emocionado.